miércoles, 3 de septiembre de 2008



— ¿Vamos a separarnos?
— No, ni menciones eso. Vos sos mi corazón, ¿acaso podría yo vivir sin mi corazón?
— Espero que no.
—Puede que no sea hoy, ni mañana, pero tengo miedo de que un día empiece a llorar y no pueda parar y se inunde la habitación y nos ahogemos los dos.
—Aprenderé a nadar.